Zenón da al espectador una introducción a la lucha en Vieques, aclarando que esto no era algo nuevo; hay pruebas y una larga historia de intervención de la Marina de los EE. UU. no solo en Vieques, sino en todo Puerto Rico. También Zenón aborda la expropiación rampante en Vieques, que empezó poco después de la llegada de la Marina estadounidense, que continuaría por los próximos cincuenta años. Incluso con pruebas documentadas de la expropiación injusta de tierras viequenses, la Marina de los EE. UU. continuó haciéndolo, lo que Zenón sostiene como el momento real y la razón por la que comenzó la lucha.